Serena está algo deprimida al sentirse que no es lo suficientemente inteligente y sofisticada para un chico como Darien. Camino a casa se encuentra con Haruka y Michiru, la cual toca maravillosamente el violín. Más tarde se entera que ella además es una reconocida pintora. Serena le cuenta que quisiera ser como ella para estar al nivel de Darien.