El affair de Carrie y Big va por su tercera semana, y la escena pasa de ser ultra-sexy a ligeramente sórdida. Estos encuentros con Big hacen que Carrie sea incapaz de relajarse en la cama con Aidan. Mientras, Samantha no entrará en el juego sexual de Tom, hasta que éste no tenga la certeza de que ella se ha hecho el test del Sida. Por su parte, Charlotte está obsesionada por encontrar el traje de boda perfecto.